Arquitectos españoles que todo el mundo debe conocer

La arquitectura en España durante el siglo XX vivió dos periodos claramente diferenciados marcados por la Guerra Civil, episodio bélico que paralizó el país y retrasó su desarrollo con respecto al resto de estados europeos.

De unos inicios de siglo marcados por el eclecticismo y el modernismo se pasa a un racionalismo previo a la guerra, que supuso el exilio de numerosos arquitectos y el inicio de un plan de reconstrucción del país.

Poco a poco, las novedades tecnológicas se van abriendo paso y, a partir de los años 60, nuevas figuras y obras más arriesgada se asientan entre los arquitectos españoles. Finalmente, a finales de siglo se abre la puerta a nuevos estilos y singularidades.

Hoy os traemos un pequeño listado con algunos de los arquitectos españoles de mayor renombre del siglo XX y principios del XXI que conviene conocer para hacerse una idea de la evolución de la arquitectura en España. Vamos allá.          

La arquitectura en España en el siglo XX


Desde luego, el modernismo marca el primer periodo de la arquitectura española del siglo XX. Arquitectos como Antoni Gaudí, inspirados tanto por el Art Nouveau llegado de Europa y por el arte mudéjar propio de la Península, protagonizan un estilo atemporal e impresionante.

Sin embargo, como contraposición al modernismo, un estilo típicamente burgués, surgió el racionalismo, con Le Corbusier a la cabeza del movimiento, para centrarse en las necesidades de una población cada vez más aglomerada en las grandes ciudades.

Este nuevo movimiento urbanista se introduce en España con la creación, en 1930 en Zaragoza, del grupo GATEPAC (Grupo de Arquitectos y Técnicos Españoles para el Progreso de la Arquitectura Contemporánea).

Pocos años después, en 1939, se crea el Instituto Nacional de la Vivienda, que debatió y presentó ponencias como la “Reestructuración nacional” o el “Plan de ciudades” dirigidas a cómo reconstruir la destrucción que la guerra había ocasionado.

Uno de los objetivos era generar un nuevo urbanismo acorde al éxodo rural y al nacimiento de una clase media orientada al consumo de bienes. Durante los principales años de la dictadura, la arquitectura de vanguardia se vio apagada en virtud de una arquitectura de tipo clásico.

No fue hasta la llegada de la democracia y los fondos de la UE cuando los arquitectos españoles pudieron emerger nuevamente aprovechando la apertura que se había dado progresivamente desde los años 60.

Los Juegos Olímpicos de Barcelona 92, la Exposición Universal de 1993 y la construcción de obras tan icónicas como La Ciudad de las Artes y de las Ciencias, en Valencia, el Museo Guggenheim de Bilbao o el Auditorio de Tenerife marcan una nueva etapa dorada para la arquitectura en España.

Algunos de los protagonistas de todas estas etapas son:

Alberto Campo Baeza

Alberto Campo Baeza (Valladolid, 1946), cursó sus estudios de arquitectura en la Escueta técnica Superior de Arquitectura de Madrid. Ha recibido numerosos premios e impartido docencia en más de 10 universidades internacionales.

En su estilo nos encontramos un gran gusto por los espacios abiertos y luminosos. De hecho, considera que la luz es el elemento central de la arquitectura.

A lo largo de su obra, que le ha llevado a recibir el Premio Nacional de Arquitectura, nos encontramos con más de 70 viviendas, además de pabellones y edificios de oficinas.

Obra destacada. Casa Gaspar

La Casa Gaspar (1992), que ha sido incluida en el Inventario de Bienes Reconocidos del Patrimonio Histórico Andaluz, es una obra de 1992 localizada en Vejer de la Frontera, Cádiz.

Esta vivienda sorprende por su sencillez y por el uso de la luz, que entra de forma horizontal y continua en el interior de la casa; y por el bajo precio que supuso su construcción.

Partiendo de un cuadrado de 18×18 metros, y en color blanco, el edificio se divide en tres partes de iguales dimensiones, pero diferentes alturas inspirada en las típicas casas andaluzas con patio delantero y trasero.

En su interior hay espacio para la naturaleza, con cuatro limoneros alineados en el patio delantero, y una pequeña alberca con agua en el trasero.

Casa Gaspar, Alberto Campo Baeza, arquitectos españoles

Enric Miralles

Nacido en Barcelona en 1955, Enric Miralles fue uno de los arquitectos españoles más interesantes de finales del siglo XX. Se formó entre la Universidad Politécnica de Cataluña y la Universidad de Columbia, en Nueva York.

En su estilo nos encontramos con intrépidos y complicados diseños, para los que utilizaba materiales como el hormigón o el acero. Miralles no buscaba romper la estética de las localizaciones con sus edificios, sino conjuntarlos y adaptarlos a la naturaleza colindante.

Lamentablemente, Miralles falleció en el año 2000, siendo finalizadas algunas de sus obras por su socia y esposa Benedetta Tagliabue, que siguió adelante con su estudio EMBT.

Durante su vida recibió reconocimientos tan prestigiosos como el León de Oro de la Bineal de Venecia en 1996 e impartió clase en diferentes escuelas de arquitectura y diseño, ocupando una cátedra en la universidad de Harvard desde 1992.

Entre sus obras más reconocidas destacan el Parlamento de Escocia, el Edificio de Gas Natural o la rehabilitación del ayuntamiento de Utrecht.

Obra destacada. Edificio Gas Natural, Barcelona

La sede de Gas Natural en Barcelona es uno de los edificios que Miralles no pudo terminar, siendo finalizado por Benedetta Tagliabue en 2006. Es uno de los edificios insignia de la ciudad condal.

Se presenta como un conjunto de edificios acristalados ensamblados entre sí, con una altura máxima de 86 metros y una superficie de más de 80.000 m2.

El edificio, con sus más de 3500 toneladas de hierro y cristal, destaca por su particular volumetría y arriesgadas formas, además de por su aislamiento eficiente y, más recientemente, por la instalación de numerosas placas fotovoltaicas en su fachada.

Enric Miralles edificio Gas Natural, arquitectos españoles

Antonio Palacios

Antonio Palacios (O Porriño, 1874), fue un arquitecto y urbanista que desarrolló su carrera, fundamentalmente, entre Madrid y Galicia. Su periodo de mayor actividad fue el primer tercio del siglo XX, con un estilo que varió del modernismo de tipo austriaco al regionalismo.

Se formó como ingeniero y arquitecto en Madrid, donde tendría su residencia, y participó junto al arquitecto Joaquín Otamendi en diferentes concursos públicos.

Es gracias a la construcción del Palacio de Comunicaciones que su prestigio aumenta, ganando un gran número de proyectos en Madrid, como el Círculo de Bellas Artes. También trabajó como docente y columnista y fue arquitecto de la Compañía del Ferrocarril Metropolitana.

Obra destacada. Palacio de Comunicaciones

El Palacio de Comunicaciones, conocido desde 2011 como Palacio de Cibeles, fue la obra que más puertas abrió a Antonio Palacios. Construido entre 1907-1919 en colaboración con Joaquín Otamendi, se adscribe al estilo neogótico.

Este monumental edificio, de más de 12000 m2 de superficie, aupó la carrera de Palacios. Con sus monumentales dimensiones, la obra se presenta con dos torres a ambos lados, flanqueando una torre central.

Cuenta con cinco plantas de piedra blanca y numerosos detalles en su fachada, desde dioses egipcios a griegos o aztecas. Como curiosidad, en su escudo central el arquitecto incluyó el escudo de Galicia, su tierra natal.

En su interior, una gran bóveda acristalada formando una galería que se extiende desde el Pasaje de Alarcó y el Patio de Coches es el elemento más llamativo. En la actualidad es el edificio utilizado por el Ayuntamiento de Madrid

Antonio Palacios, Palacio de Cibeles

Alejandro de la Sota

El arquitecto Alejando de la Sota nació en Pontevedra en 1913, formándose en la Escuela de Arquitectura de Madrid, donde finalizaría en 1941. Adscrito al movimiento moderno, se interesó por los retos de la ingeniería civil y el uso de nuevos materiales.

Como arquitecto, formó parte, durante sus primeros años, del Instituto Nacional de Colonización, y es partir de los años 50 cuando comienza a ganar prestigio gracias a su participación en concursos de arquitectura.

Funcionario de la Dirección General de Correos, ejerció la docencia y participó en charlas sobre arquitectura, lo que llevó a que su obra haya sido expuesta y reconocida a nivel mundial.

Obra destacada. Gimnasio Maravillas

Alejandro de la Sota fue el arquitecto asignado para ampliar, en 1962, el Colegio Maravillas, en Chamartín, Madrid. El proyecto consistió en ampliar el patio, crear un gimnasio y añadir nuevas aulas a la escuela.

Las aulas, el gimnasio y el resto de los añadidos salvan un desnivel de 12 metros con respecto a la calle. El sótano del colegio se sustenta sobre una estructura de pilares de hormigón, siendo el resto de la estructura del gimnasio de hierro.

A pesar de contar con casi 60 años, el gimnasio sigue siendo utilizado por los alumnos del colegio y, en el año 2019, fue declarado Bien de Interés Cultural.

Conviene señalar que De la Sota recibió el Gran Permio Nacional de las Artes Plásticas de 1963 por su trabajo en este edificio.

Alejandro de la Sota, gimnasio maravillas

Aníbal González Álvarez-Ossorio

Aníbal González Álvarez-Ossorio (1876), fue un arquitecto sevillano formado, como muchos otros miembros de este listado, en la Escuela Superior de Arquitectura de Madrid.

En este caso no tenemos que esperar varios años para ver su trabajo, pues su carrera comenzó mientras todavía se estaba formando. En su época de estudiante presentó un pabellón en la Exposición de Pequeñas Industrias de 1901.

Durante su carrera se interesó por los estilos historicitas y neomudéjar, y es actualmente reconocido como el mayor exponente del regionalismo andaluz de principios del siglo XX.

Protegido por su primo-hermano Torcuato Luca de Tena, su obra fue prolífica y pasó de un modernismo inicial al historicismo y la influencia mudéjar. La mayor parte de sus obras nos las encontramos en Sevilla y Andalucía.

Obra destacada. Plaza de España

De entre sus muchos proyectos, a pesar de su corta trayectoria, destaca, por encima de los demás, la Plaza de España de Sevilla, cuya construcción comenzó en 1914 para concluir en 1929.

Se trata de un conjunto arquitectónico creado inicialmente como el edificio principal de la Exposición Iberoamericana de 1929. La plaza cuenta con un lago semicircular y dos torres gemelas, y destaca por la combinación de ladrillo y azulejos, en los que están representadas las 48 provincias españolas.

Cuatro puentes conectan el lago con la plaza, que está considerada como el máximo exponente del regionalismo andaluz. Actualmente, una estatua del arquitecto se encuentra instalada en la plaza a modo de homenaje.

Plaza de España, Aníbal González

Eduardo Torroja

Eduardo Torroja, ingeniero madrileño nacido en 1899, se especializó en la ingeniería civil y en el uso del hormigón. Tras finalizar sus estudios se incorporó, hasta 1927, a la Compañía de Construcciones Hidráulicas Civiles.

En 1932 recibió el Premio Nacional de Arquitectura por su colaboración con el arquitecto Manuel Sánchez Arcas en el proyecto de la Central Térmica de la Ciudad Universitaria de Madrid.

Tras la Guerra Civil, en 1939, se dedicó a la docencia en la Escuela Especial de Caminos, Canales y Puertos. Ese mismo año, el Instituto Técnico de la Construcción y la Edificación decidió integrar su nombre en su denominación.

Obra destacada. Mercado de Abastos de Algeciras

En 1935, de la alianza formada por Eduardo Torroja y el arquitecto Manuel Sánchez Arcas nació la rehabilitación del mercado de Abastos de Algeciras, obra más destacada de Torroja.

El interior del mercado se divide en cuatro calles radiales que van a dar a una plaza central, justo debajo del lucernario que preside la obra. Se comunican 100 puestos entre las calles radiales y las concéntricas interiores.

Sin embargo, lo que más llama la atención del mercado es su cúpula de hormigón, que se eleva hasta casi los 50 metros. En su clave nos encontramos con un lucernario octogonal con nervaduras de hierro cruzadas cubiertas por piezas de vidrio.

Este lucernario se encarga de llenar de luz el mercado, que se sostiene sobre ocho puntos y una viga de arriostramiento que los conecta entre sí.

Mercado de Abastos de Algeciras, Eduardo Torroja, arquitectos españoles

En este punto damos por finiquitado este primer repaso a algunos de los arquitectos españoles más famosos y de mayor recorrido del siglo XX. Si te apasiona la arquitectura no dejes de visitar nuestra galería de proyectos y de estar pendiente de nuestras novedades sobre arquitectura y construcción.